Domingo, 16 de marzo de 2008

Jesús dijo: “Mi gente, han leído el dolor y el sufrimiento que soporté en la cruz, aunque ustedes compartieron un poco de sufrimiento al estar de pie leyendo Mi Pasión. Cuando llegaron a casa, se dieron cuenta de que su crucifijo quedó atrás donde viajaron. Algunas de sus armas espirituales especiales son demasiado valiosas para arriesgarse a perderlas, y el maligno sabe cómo distraerlos para que las olviden. Sean más cuidadosos con sus reliquias, y mantengan su agua bendita y aceite santo siempre disponibles para bendecir a la gente. Mi cruz es cómo sufrí por sus pecados, y esta vista de Mi cruz en su altar es importante para que la gente se mantenga enfocada en Mí todo el año. Recuerden todos los días recoger su cruz y llevarla conmigo, para que puedan compartir sus sufrimientos conmigo en Mi cruz. Tendrán que llevar su cruz hasta el día que mueran, tal como yo tuve que morir en el Calvario. Morir y sufrir no son fáciles de soportar, pero están seguros de que, con confianza en Mí, verán su resurrección tal como yo resucité.”