Sigan rezando el Rosario. Lean Lucas, capítulo ocho, todo, varias veces, e intenten meditar en este pasaje del Evangelio.
"Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Capilla de las Apariciones - 22:30 p.m.
"- Mis hijos, usen el Escapulario del Carmelo con Fe y Devoción, porque les prometo que ayudaré con la Gracia de mi Madre a aquellos que al momento de la muerte lo tengan, y lo hayan usado toda su vida, con Fe y Devoción.
Deseo que tengan dentro de su corazón un ardiente AMOR a Jesús, y un ardiente AMOR por la salvación de las almas.
Sepan que no hay 'obra' más querida y más deseada por DIOS que la oración".