Todo aquel que no nazca de Agua y Espíritu no entrará en el Reino de DIOS. Es necesario que nazcas de nuevo'. (Jn. 3:5-7) Así le dijo mi Hijo a Nicodemo.
Hijos míos, hoy deben nacer de nuevo, a través de una profunda conversión al Señor. Pedidle al Espíritu Santo que se derrame sobre vosotros y os purifique de todo pecado.
Hijos míos, aprovechad estos profundos días de Gracia y rezad por los dones del Espíritu Santo para vosotros. Yo rezaré por vosotros.
Confesaos para ser limpiados de vuestros pecados. Os acompaño en la oración del Rosario con vosotros.
Os bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.